¡Feliz día Internacional de la Mujer!


Debió ser un artista con estro inconcebible
sumido en las bondades de eterno arrobamiento,
quien hizo con pinceles de nobles sentimientos
la obra más preciosa, más digna y admirable.

Tomó infinitas luces de mística nobleza
y empíreas mixturas de amor y ensoñación,
logrando así el milagro de un tierno corazón
trazado en mil matices de espiritual belleza.

Del fondo más sublime de un cielo de entereza
extrajo prodigiosas acuarelas de ilusión,
y con rasgos provenientes de divina inspiración
grabó un alma radiante de amor y de firmeza.

Impregnó todo su lienzo, con ecos de oración
de un tono inexcrutable, idílico, distinto,
el más hermoso fondo: el maternal instinto,
razón que da la vida, motor de la creación.

Jamás podrá saberse de dónde este pintor
logró arrancar la esencia que a todos embelesa,
para imprimir en su obra tal grado de belleza
con tintes pasionales y aromas de candor.

Viviremos admirando, aún sin entender,
la obra más hermosa, orgullo de este mundo,
que habita en nuestras almas, pero en lo más profundo;
pues eres tú la ungida, siempre serás: Mujer.


Penas y alegrías del amor